Cinco diferencias de la investigación de dispositivos y la de medicamentos
Aunque podríamos pensar que la evaluación de dispositivos es similar a la evaluación de fármacos, son muchas las características propias de los dispositivos que es necesario tener en cuenta.
1. ¿Cómo nacen los dispositivos?
A diferencia del desarrollo de nuevos fármacos, cuyo avance está asociado a décadas de investigación y complicados procesos bioquímicos y moleculares, las ideas que dan lugar a los dispositivos provienen, con frecuencia, de clínicos que ven en su práctica la necesidad de mejorar un procedimiento diagnóstico o terapéutico.
2. Desarrollo incremental
En el mejoramiento o avance de los dispositivos, lentamente se van haciendo mejoras en un equipo, sin que esto signifique hacer estudios clínicos controlados, que son tan frecuentes en medicamentos que buscan probar nuevos beneficios. Por eso muchos dispositivos entran en uso apoyados solamente por algunos estudios observacionales. Y los que se emplean en un momento dado son muy diferentes de los empleados en los estudios originales.
3. Tiempo
Lo anterior hace que el tiempo desde su creación al momento de su implementación sea muy corto, comparado con los medicamentos. Su vida útil, también.
4. Recambio acelerado
Dado que la innovación tecnológica en dispositivos es más rápida, y por lo tanto pasar de ser novedad a ser obsoleto es un ciclo relativamente corto, al hacer evaluaciones económicas deberían utilizarse horizontes temporales más cortos.
5. Efectividad
En términos generales la efectividad en medicamentos depende de la eficacia probada y la adherencia de los pacientes, sin embargo en el mundo de los dispositivos tenemos un importante número de casos donde la efectividad es operador dependiente y por esto se requiere una curva de aprendizaje.
Para saber más les recomendamos el libro “Investigación de resultados de dispositivos terapéuticos y de diagnóstico” publicado por ISPOR con el apoyo del capítulo regional colombiano.
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